Philip Potdevin
A mis alumnos borgianos de la Central
“Ahora... pienso que si lo escribo, los otros lo leerán
como un cuento y, con los años, lo será tal vez para mí”.
BORGES, EL OTRO
Imposible permanecer imperturbable ante la persistente manía de nuestros analistas, cronis-tas e historiadores de la Revolución de Octubre de soslayar el nombre de Felipe Piñeros Otálora y su participación directa en los sucesos de 1917 en Petrogrado.
“Estebana, atenta a los movimientos de su marido, le dijo, a media voz:
–Quieres que te prepare un cocimiento de valeriana?
–Mira mujer, es mejor que te acuestes sola; la razón que me irrita los nervios no es de las que calman la valeriana, ¿No ves que se trata del último pedazo de tierra?
Por Philip Potdevin*
(Tomado de Le Monde Diplomatique, edición Colombia No. 166, mayo de 2017)
Una de las leyes de la acción dramática es que a la estrella debe enfrentársele un antagonista que se oponga a sus designios. En La tempestad, la mejor de las obras de Shakespeare y la más incomprendida, el invasor Próspero ha esclavizado a Calibán, el habitante originario de la isla. Éste no se doblega ante el atropello de Próspero. Al contrario.
Por Philip Potdevin
Literatura y realidad, como espejos enfrentados, permiten ahondar recíprocamente en los relatos que cada una construye de una época. Colombia, país atravesado por la violencia desde antes de su concepción republicana, y que aún hoy no logra sacudir el estigma del conflicto armado, sigue produciendo una literatura que, en gran parte, es ajena a su problemática social y peor aún, a su propia tradición.
La presente ponencia es parte del Seminario Internacional Tres dias con Coetzee, realizado en Bogotá del 8 al 10 de abril del 2013. El autor es Philip Potdevin.